En la sección de hoy, los dos redactores vamos a enfrentar posturas respecto a la película Deep Blue Sea. Pero antes, conoceremos un poquito de intrahistoria sobre ella. Este film fue distribuido por Warner Bros (poca broma). Aunque principalmente la idea se originó en 1992, no tenían la suficiente tecnología para desarrollarla, lo que hizo que se pospusiera unos años. El papel protagónico fue ofrecido tanto a Jean Claude Van-Damm, como a Bruce Willis, pero, acabaron rechazando la propuesta. Esta se filmó en Baja California, México, ya que allí disponen de los tanques de agua más grandes del mundo, donde se rodó Titanic. El coste total de producción, fue de 60 millones de dólares y en términos de recaudación, fue un éxito, con unos ingresos de 165 millones. Tuvo una recepción media de la crítica especializada, aunque en nuestra página, la que cuenta es la crítica de andar por casa.
Deep Blue Sea: Poli bueno
Tiburones gigantes, inteligentes, modificados genéticamente y Samuel L. Jackson. ¿Qué más se le puede pedir a la vida?, sinceramente, yo creo que nada. Esta película es un clasicazo dentro del género de cine de tiburones. En 2016 la revista Wired la coronó como segunda mejor película de tiburones de la historia, tan solo por detrás de Tiburón de Steven Spielberg. Contó con unos efectos especiales alucinantes para la época y unas muertes tan brutales que ponían los pelos de punta. Deep Blue Sea se convirtió inmediatamente en una película de culto que todo fanático del género debería ver.
La cinta nos narra una historia de valentía, superación y grandes héroes. Y es que un grupo de malvados científicos ha hecho prisioneros a una panda de inocentes tiburones y los tienen prisioneros en sus diabólicas instalaciones para someterlos a terribles experimentos. Pero el día de la venganza ha llegado. Una noche de tormenta un espectacular tiburón mako logra herir a uno de sus captores y este tiene que ser trasladado al hospital. El líder del grupo, un majestuoso ejemplar de gran blanco aprovecha la oportunidad para crear el caos en los laboratorios. Logrando así liberar al resto de compañeros escualos.
El reparto humano también es espectacular. Están todos los personajes que una buena peli de tiburones debe tener. El tío que muere al principio, el típico cobarde que solo saber decir “vamos a morir”, la pareja sentimental del cobarde que su única misión es infundir valor al resto del grupo pero que acaba siendo comida para tiburones antes que los demás, el graciosillo, el héroe, el amigo del héroe que muere siempre ante sus ojos sin que el otro pueda hacer nada por evitarlo y como no, el personaje al que todos odian y que logra sobrevivir hasta el final pero también acaba muriendo. Y luego está Samuel L. Jackson, que puede hacer lo que quiera porque su sola presencia hace que la película se convierta en un peliculón.
Si aún no has visto Deep Blue Sea no se a que estas esperando. Corre ahora mismo a verla. Coge un buen bol de palomitas y agarra la mano de la persona que tengas al lado si no quieres caerte del asiento.
Deep Blues Sea: Poli malo
Voy a intentar ser un poco benévolo, ya que mi contrario es hiper mega fan de esta, y no quiero causarle malestar alguno. Para empezar, ¿Jean Claude Van-Damme rechazó el papel? Esto ya debería ponernos en alerta de lo que se nos viene encima. Y conste, que en esta página, Van-Damme al poder, pero ganador de un Oscar, como que no. Continuemos con el apartado visual, se nos vende la moto de que es una maravilla técnica para la época, pues bien, Titanic y Terminator 2 son anteriores, comparen y dicten sentencia. Y por último, la trama, una película de tiburones inteligentes y todo lo que les rodea, un sinsentido monumental, ya que la quieren poner a la altura de una obra maestra como Tiburón.
¿Dónde veo el principal problema? Pues en lo anteriormente mencionado, en querer ponerla como una producción top. La única manera de verla satisfactoriamente es, no teniendo constancia de su existencia, y pensar que es una continuación de Sharknado.
Aún así, si te sigue interesando verla, está disponible en Amazon Prime Video. Eso sí, en alquiler, para seguir sacándole el dinero a la gente 23 años después
